Propuesta de educación para el desarrollo sostenible para estudiantes de primaria (primer ciclo), de la comunidad de Santo Domingo de Heredia, Costa Rica
Fecha
2022
Tipo
tesis de maestría
Autores
Bolaños Ocampo, María Alexandra
Título de la revista
ISSN de la revista
Título del volumen
Editor
Resumen
Durante el transcurso del último milenio las prácticas sociales han entrado en crisis que
afectan los ámbitos económicos, sociales, ambientales y culturales de la sociedad global
(MASHAV, 2016). Este cambio de realidades genera incertidumbre en los ciudadanos, lo
que conduce a que diferentes grupos busquen soluciones y se den respuesta a los conflictos
mediante la justicia social, la equidad, la credibilidad; los cuales están siempre sujetos a los
diferentes contextos que tiene el ser humano. Una de estas respuestas se ha reflejado en
procesos de intervención a nivel educativo ambiental, como respuesta a problemas
ambientales (Calvo, 2015; Calvo y Gutiérrez, 2007).
Los problemas ambientales nunca se presentan aislados y se encuentran vinculados a
múltiples facetas en la sociedad humana como la actividad social, los procesos de crecimiento
poblacional, el urbanismo, el transporte, la salud, la ciencia, la tecnología, la industria, el
comercio, la minería y la agricultura (Matarrita y Tuk, 2001). De forma tal, que se convierten
en puntos focales para las iniciativas de acción y la generación de nuevos conceptos aplicados
ante la crisis socioambiental; estas acciones toman especial relevancia en las sociedades
desarrolladas. La educación ha sido la principal herramienta para poder contrarrestar la
afectación por esta crisis socioambiental.
La educación ha adoptado objetivos y estrategias que contribuyen al bienestar individual y
colectivo, que incluye la modificación de los entornos naturales o construidos. Estas
iniciativas educativas han generado reflexión ante cuestiones como la igualdad de
oportunidades sociales, la función económica del sistema educativo en el mercado productivo
laboral, la preservación del ambiente y la formación de valores (Calvo, 2015).
Caride (2001) indica que el papel de la educación permite la incorporación de diferentes
perfiles semánticos, conceptuales y “paradigmáticos” en los modos de imaginarla y
practicarla. A menudo, producto de la innovación pedagógica que surge del inconformismo
creador o de los retos que inducen realidades o problemáticas sociales, culturales o
ambientales emergentes (por ejemplo, en aspectos que se relacionan con la multiculturalidad,
la marginación social, el tiempo libre, el mercado laboral, los valores cívicos, entre otros.).
2
Como resultado de una reconceptualización obligada de los parámetros institucionales de la
educación y la cultura, de los espacios y tiempos sociales, de las estructuras organizativas
(...), ha dado lugar a una variada gama de "educaciones" y "sistemas formativos" (formal, no
formal, informal, de adultos, comunitaria, urbana, intercultural, cívica, entre otros). Lo
anterior, con la intención de hacer más explícitas las responsabilidades para una sociedad
más saludable (Caride, 2001).
Dentro de los procesos formativos se incluyen propuestas de educación ambiental para el
desarrollo sostenible, como respuesta educativa para un futuro sostenible, abierta a
la necesidad de "encontrar nuevas articulaciones para construir alternativas cognoscitivas
que nos brinden posibilidades de conocer la complejidad ambiental” (González, 2000).
Consecuentemente, con lo que esa complejidad requiere en los planos epistemológico,
metodológico y pedagógico (Caride, 2001).
Según Matarrita et al. (2001) la educación costarricense debe contener la perspectiva del
desarrollo sostenible, ya que proporciona herramientas que ayudan al individuo, a fin de
partir con su realidad inmediata y que desarrolle la capacidad de hacer propios conocimientos
y valores éticos, los cuales le permitan ofrecer una respuesta participativa, responsable y
solidaria en constante relación con su medio ambiente, tanto en el ámbito local, nacional o
internacional. Esto permite fortalecer las iniciativas regionales con programas de formación,
proyectos de participación de la sociedad civil, con la elaboración de agendas locales y
nacionales (Macedo y Salgado, 2007).
3
Aún más profundo nace la educación para el desarrollo sostenible, la cual debe entenderse
como: “La educación que tiene como objetivo despertar la conciencia crítica sobre los
problemas que afectan al ambiente, el medio social, el económico y el ético, y se define como
el proceso mediante el cual, un individuo adquiere conocimientos, interioriza actitudes y
desarrolla hábitos que le permiten modificar su conducta individual y colectiva” (Matarrita
y Navas, 1996; Matarrita, 2001). “El compartir conocimientos, el desarrollo de las
habilidades, destrezas consiguientes, la internalización de los valores y actitudes, propician
la conservación de dichos ciclos, procesos y equilibrios, quienes constituyen el objeto y la
tarea de la educación para el desarrollo sostenible, en donde el alcance no es solo en el ámbito
cognoscitivo sino también el afectivo” (Marrita y Tuk, 2001).
De acuerdo con lo anterior, se pretende diseñar una propuesta de programa de educación
ambiental para el desarrollo sostenible, que colabore con la generación de mejores conductas
individuales y colectivas en infantes de primer ciclo del cantón de Santo Domingo de
Heredia, Costa Rica.
Descripción
Palabras clave
EDUCACIÓN, DESARROLLO SOSTENIBLE, EDUCACIÓN AMBIENTAL, SOSTENIBILIDAD, INFANCIA, PRIMERA INFANCIA